Carlos A. López Garcés
Cronista del Municipio José Tadeo Monagas
Estado Guárico
1.-
Requisito insustituible
La base
fundamental de la investigación histórica es la noticia contenida en cada
escritura confiable, que, por razones
éticas, sirva para defender, sostener y conservar la credibilidad del historiador como
contribuyente de conocimientos útiles para la comprensión del hecho
investigado, según lo indique esa fuente noticiosa, porque esta sigue siendo un
recurso metodológico primordial e ineludible para quienes hicieron y hacen de
la honrosa actividad de investigador un componente intrínseco de sus respectivas
labores cotidianas. Esta opinión puede
deducirse de acuerdo con una sentencia recordada por el reputado académico José
Antonio De Armas Chitty (1908-1995), cuando afirmó que “…La historia tiene que partir de documentos…” en una carta fechada
en Caracas el 15 de noviembre de 1966 y remitida al director del quincenario
vallepascuense Región, señor Lorenzo
Rubín Zamora, quien la publicó en la página 2 de la edición Nº 44, que circuló
en Valle de la Pascua el 30 de noviembre de 1966. La misiva fue redactada como
respuesta a ciertas refutaciones insubsistentes que dos respetables y
apreciados ciudadanos, el presbítero Francisco Hurtado y el profesor Rafael
López Castro, habían hecho públicas, en ese mismo periódico, con respecto a las
investigaciones de De Armas Chitty sobre los orígenes de Zaraza.
2.-
Documento interesante
La consideración anterior surge a propósito de
un documento interesante para la historia del Guárico, conservado en el Archivo General de la
Nación, que es una copia con data en Puerto Cabello del 17 de junio de 1828,
avalada por el capitán mayor Demetrio Chichiria y el comandante Orta, hecha con
datos tomados de una hoja original de servicios militares de Hipólito Rondón,
de cuando este era plaza del Escuadrón Granaderos Montados del Zulia y tenía el
grado de primer comandante con 30 años de edad cumplidos.
Es
pertinente recordar que Hipólito Rondón fue un héroe de la independencia nacido
en Taguay (estado Aragua) el 13 de agosto de 1797 y muerto en Lezama (estado
Guárico), donde fue sepultado el 30 de septiembre de 1865; participó en la
lucha emancipadora desde el año 1813 hasta 1823, combatiendo al mando de Simón
Bolívar, Vicente Campo Elías, Gregorio Mac Gregor, José Félix Ribas, Pedro
Zaraza, Santiago Mariño, Manuel Cedeño, José Antonio Páez, José Francisco
Bermúdez, Manuel Manrique y de otros jefes de menor rango. Rondón es uno de esa
numerosa cantidad de héroes olvidados o casi desconocidos, que significaron un
elemento indispensable para la independización venezolana del colonialismo
hispánico y fueron identificados como correspondientes a lo que el intelectual
Lino Iribarren Celis llamó “el procerato
menor” en un artículo suyo impreso en la página 4 del diario El Universal Nº 18.950, editado en
Caracas el 6 de marzo de 1962.
3.-
Pregunta inevitable
En
atención al título de este escrito debe decirse que, en el documento antes
mencionado, Rondón da cuenta de su asistencia activa en “La [acción] del Pueblo de Carbario [sic] a las ordenes del Coronel Pedro
Hernandez” en 1820. Esta
aseveración motiva una pregunta inevitable: ¿A cuál acción de guerra se refiere
este documento? La interrogante se origina porque las fuentes revisadas para
realizar este trabajo no aportan noticias precisas acerca de ese caso que habría ocurrido en El Calvario, pueblo
ubicado al noreste de Calabozo en territorio guariqueño. Por otra parte, es
conveniente advertir que el documento precitado contiene algunos desaciertos,
como son por ejemplo: las batallas de San Marcos y de Semen las data en 1812 y
la de Bocachica en 1813, que, como es sabido, la primera sucedió el 8 de
diciembre de 1813, la segunda el 16 de marzo de 1818 y la tercera el 31 de
marzo de 1814, amén de contener otras equivocaciones por causas desconocidas.
4.-
Algunas observaciones
Las
circunstancias mencionadas en el párrafo precedente animan para procurar la clarificación del dato documental
problema, por lo que es factible hacer algunas observaciones concretas:
1ª.- Está negada la posibilidad de que se trate de
la batalla acaecida en las sabanas de Mosquiteros, en las proximidades de El
Calvario, el 14 de octubre de 1813, cuando fuerzas independentistas comandadas
por el teniente coronel Vicente Campo Elías derrotaron a las tropas dirigidas
por el general José Tomás Boves. Esta negación es indiscutible, pues el
documento que se comenta cita la acción de guerra como acontecida en el pueblo
de El Calvario en 1820 y dirigida por el coronel Pedro Hernández; además, allí
mismo está registrada la presencia de Rondón en la batalla de Mosquiteros a las
órdenes de Campo Elías, pero como sucedida en 1812, lo que es un error
evidente.
2ª.- Algo ocurría en el pueblo de El Calvario un
día después del combate de El Sombrero acaecido el 16 de febrero de 1818, porque, desde esta misma localidad y con
fecha 17 de febrero de ese año, el Libertador le ordenó al coronel Jacinto Lara
que debía tomar el pueblo de El Calvario con las tropas asignadas por el
general Manuel Cedeño, para proclamar allí la independencia y restituirle la
libertad a sus pobladores (O’LEARY:
1981, t. 15, pp. 575, 576). Esta orden fue impartida en los términos
siguientes:
“Al señor Coronel Lara.
Marche US. con las tropas que el señor
General Cedeño le designe al pueblo del
Calvario, a proclamar la independencia, y restituir a los habitantes la libertad.
A su entrada, publicará la adjunta proclama,
e invitará a los vecinos para que vengan a gozar en sus casas de los
bienes que en ella se les ofrece, atrayendo a los que se les presenten, con un
tratamiento dulce y paternal.
Entre
los vecinos elegirá US. el que sea más honrado, activo y patriota y le encargará el mando del pueblo, para que
conserve el orden, administre justicia interinamente
y reúna a todos los habitantes.
Concluida que sea esta especie de
organización, marchará US. con las tropas
a reunirse al ejército en Calabozo por el camino más recto, llevando cuantas noticias haya del enemigo, y los
caballos que puedan conseguirse útiles.
Recomiendo a US. que se invite [sic] y
reprima todo desorden, robo, vejación
o exceso de las tropas contra los vecinos. Haga US. que se porten todos con la moderación y virtud que
deben distinguir a los republicanos.
Dios etc.
Sombrero, Febrero 17 de 1818 – 8º
Bolívar”
El
comentario precedente viene al caso
porque el general Miguel de La Torre y sus fuerzas realistas se trasladaron a
El Calvario después de derrotar en La Hogaza, el 2 de diciembre de 1817, a los republicanos comandados por el general
Pedro Zaraza. La Torre y su ejército
permanecieron en dicho pueblo durante varios días de diciembre de 1817; fueron
tantos que aún estaban allí el día 28, cuando se preparaban para un nuevo
enfrentamiento en el hato de Belén, de acuerdo con afirmaciones del académico
Oldman Botello en su libro San Pedro de
El Calvario, Centro de Venezuela (San Juan de los Morros, 2011, p. 59).
Esta noticia induce a sospechar posibles secuelas antipatrióticas que habrían
quedado en El Calvario, aun en las primeras quincenas del año 1818, debidas a
la larga permanencia realista, lo que habría influido en la imperiosa necesidad
de contrarrestarlas mediante la ocupación del pueblo con el fin de defender la
independencia, recuperarle la libertad a sus pobladores e invitarlos a regresar
a sus casas para organizar el vecindario, conforme a palabras del Libertador
escritas en El Sombrero, que ya fueron citadas.
Debe
decirse que esta sospecha no aclara la acción de guerra en el pueblo de El
Calvario mencionada en la hoja de servicios militares de Hipólito Rondón, donde
está registrada como un hecho de 1820 y no de 1818, en el cual Rondón participó
a la orden del coronel Pedro Hernández, como fue dicho antes, y no del coronel
Jacinto Lara. Sin embargo, es conveniente anotar que, al parecer, la orden dada
por el Libertador al coronel Lara fue cumplida al día siguiente de su
impartición, pues el “Día 18.- Se
mandaron destacamentos de caballería a El Calvario…” tal como lo revela,
sin detalles, el Diario de Operaciones del Ejército correspondiente al mes de
febrero de 1818, incluido en las Memorias
del general O’Leary (Barcelona,
1981, t. 15, p. 613), lo cual es un estímulo para suponer que en uno de
aquellos destacamentos de caballería quizás iba Hipólito Rondón al mando del
coronel Pedro Hernández; esto es decir que la acción de El Calvario, referida
en la hoja de servicios de Rondón, tal vez equivale realmente a la toma de ese
pueblo ordenada por Bolívar en 1818 y no
a otro hecho que fue datado en 1820, máxime cuando la hoja de servicios que se
comenta reseña la presencia de Rondón en la batalla de El Sombrero, a la orden
del Libertador en 1818; además, es importante añadir que Rondón siempre fue de
la caballería. Por estas razones puede
pensarse en que se trata de otra posible equivocación estampada en la hoja en
comento.
3ª.- No debe confundirse el pueblo de El Calvario,
ubicado al noreste de Calabozo, con la
colina El Calvario, sita al oeste de Caracas, donde las fuerzas republicanas
dirigidas por el general José Francisco Bermúdez fueron derrotadas por las
tropas realistas al mando del coronel José Pereira, el 23 de junio de 1821
(DÁVILA: 1926, p. 36). Eran días de la
denominada Distracción sobre Caracas,
cuando Rondón militaba en las tropas de Bermúdez, quien comandaba aquella
actividad bélica ordenada por el Libertador para disminuir la concentración de
fuerzas realistas en el campo de Carabobo, el 24 de junio de 1821 (RESTREPO: 1969, t. IV, p. 256, 257. DE MOSQUERA:
1983, pp. 339, 340). La asistencia de Rondón en estas acciones sobre la capital
está registrada en su hoja de servicios, con lo cual se anulan supuestas
confusiones con respecto al caso en estudio.
4ª.- Es obligatorio hacer una pregunta: ¿Quién era
el coronel Pedro Hernández? La respuesta es difícil satisfacerla plenamente,
porque son desconocidas las posibles informaciones relacionadas con este jefe
que asistió a la acción de guerra en el pueblo de El Calvario, que ahora es
motivo de investigación. Por esto es oportuno transcribir el aporte del Diccionario de Historia de Venezuela editado
por la Fundación Polar (Caracas, 1997, t. 2, p. 681) sobre un independentista
venezolano de nombre Pedro Hernández, de quien apenas dice que fue un “líder patriota ejecutado por el jefe
realista Francisco Tomás Morales en la costa oriental del lago de Maracaibo”
en diciembre de 1821, para referirse al padre del poeta, impresor y periodista
Pedro Hernández Moreno, quien nació en Maracaibo, estado Zulia, el 30 de agosto
de 1821 y falleció en Cúcuta, Colombia, el 18 de mayo de 1874, cuya madre era
Asiscla Moreno. No ha sido posible confirmar que se trata del mismo personaje
mencionado por Rondón.
5ª.- El acreditado cronista de Maracay, profesor,
periodista y académico Oldman Botello, a propósito de estar redactando una
historia del estado Guárico, fue interrogado en Taguay, el domingo 13 de
noviembre de 2016, por el autor de estos apuntes con respecto a ese hecho bélico
en El Calvario y la factibilidad de que hubiese sido un combate. Su respuesta
fue así: “No tengo ninguna información
sobre lo que me dices. Debió ser un encuentro pequeño sin mayores
consecuencias. En toda la bibliografía y documentación consultada para escribir
la Historia del Guárico no apareció ese encuentro, si es que lo hubo.”
Conclusión
Aun cuando las fuentes consultadas
para realizar este trabajo no aportan noticias taxativas que sirvan para
esclarecer la acción de guerra acaecida
en El Calvario, reseñada en la hoja de
servicios militares de Hipólito Rondón como ocurrida en 1820, es posible
suponer que datarla en este año fue un equívoco con respecto a la ocupación de
ese pueblo por orden del Libertador, impartida desde El Sombrero el 17 de febrero
de 1818. Al parecer, aquel mandato fue ejecutado al día siguiente con comandos
de caballería enviados también desde El Sombrero, en uno de los cuales tal vez iba Hipólito
Rondón al mando del coronel Pedro Hernández.
Esta conjetura tiene cierto grado de coherencia, porque Rondón era
jinete e intervino en la batalla de El Sombrero a la orden del Libertador.
No
obstante, es de interés resaltar, en honor a la verdad histórica, que las
informaciones recopiladas sobre este caso son insuficientes; no alcanzan para
evidenciar que la acción bélica registrada en la hoja de servicios militares de
Hipólito Rondón está relacionada con la ocupación de El Calvario en 1818
ordenada por Bolívar. Esto significa que la averiguación debe continuar, pues
se trata de un asunto desconocido que incita a investigarlo plenamente para el
enriquecimiento de la historia del Guárico y en particular de la parroquia El
Calvario del municipio Miranda; aunque esta labor requiere de la participación
de todos los interesados, porque la investigación histórica no es exclusividad
de alguien, como lo dijo el académico José Antonio De Armas Chitty cuando
afirmó con razón que “…jamás he creído
que la historia es monopolio de una persona…”
en la misma carta enviada al señor Lorenzo Rubín Zamora, director
del periódico Región, editado en
Valle de la Pascua el 30 de noviembre de 1966, que fue comentada en el primer
párrafo de esta exposición(1).
______________
(1) Nota. Este trabajo fue leído en el XI Encuentro de Cronistas e Historiadores
de Venezuela en Calabozo, municipio Sebastián Francisco de Miranda, estado Guárico.
Fue escrito especialmente para ese acto que tuvo lugar el sábado 30 de
septiembre de 2017, en el Salón Belluno del Hotel Plaza Real de esa ciudad
llanera.
FUENTES
I.- Documentales
ARCHIVO GENERAL DE LA
NACIÓN (A.G.N.). Caracas.
II.- Bibliográficas
BOTELLO, Oldman. San Pedro de El Calvario, Centro de
Venezuela. San Juan de los Morros.
Sistema Nacional de Imprentas del Estado Guárico, Fundación Editorial el perro y la rana, Red Nacional de
Escritores y Escritoras Socialistas de Venezuela, Colección José Antonio de Armas Chitty; 2011.
DÁVILA, Vicente. Acciones de guerra en Venezuela durante su Independencia. Caracas. Tipografía Americana; 1926.
DE ARMAS CHITTY, J.A. Historia del Estado Guárico. Caracas. Ediciones de la Presidencia de la República; 1982.
DE ARMAS CHITTY, J.A. Historia del Guárico (1807-1974). San
Juan de los Morros. Impreso en los
Talleres de Gráficas Los Morros, t. II; 1978.
DE MOSQUERA, Tomás
Cipriano. Memorias sobre la vida del
general Simón Bolívar. Caracas.
Ediciones de la Presidencia de la República, cuarta edición, vol. 182; 1983.
Diccionario de Historia de Venezuela. Caracas. Fundación Polar,
segunda edición, t. 2; 1997.
Memorias del General O’leary. Barcelona, España.
Ministerio de la Defensa de Venezuela,
t. 15, 16; 1981.
RESTREPO, José Manuel. Historia de la Revolución de Colombia.
Medellín, Colombia. Editorial Bedout,
t. III, IV; 1969.
RODRÍGUEZ, Adolfo. El estado Guárico: Orígenes, mundo y gente.
San Juan de los Morros. Comisión
Regional Conmemorativa del V Centenario del Encuentro de Dos Mundos del Estado Guárico; 1994.
RODRÍGUEZ, Adolfo. Mural de los pueblos del Guárico. San
Juan de los Morros. Asociación
Civil Editorial Guárico, vol. 41; 2008.
III.- Hemerográficas
BOTELLO, Oldman. “Un prócer ignorado”. Columna:
Curucuteando el arcón. el siglo.
Año XVIII - Nº 6.038. Maracay, domingo 7 de octubre de 1990, p. A-2.
DE ARMAS CHITTY, José
Antonio. “Por los orígenes de Zaraza”.
Región. Director: Lorenzo Rubín Zamora. Año III – Nº 44.
Valle de la Pascua, 30 de noviembre de 1966,
p. 2
IRIBARREN CÉLIS, Lino. “El Prócer Guariqueño Hipólito Rondón”. Columna: Atisbos de la Hora. El Universal.
Año LIII – Nº 18.950. Caracas, martes 6 de marzo de 1962, p. 4.
IV.- Información oral
BOTELLO, Oldman.
Taguay, domingo 13 de noviembre de 2016.
1 comentario:
Вгражной канст козы соет напновена канст изые
Вгражной titanium earring posts канст изые titanium earrings sensitive ears канст titanium tube изые titanium for sale канст titanium belt buckle изые канст изые
Publicar un comentario